Crónica viva, memoria trazada
Durante los pasados siete años he estado investigando sobre las emociones y su efecto en nosotros, sobre todo en momentos de enfermedad o shock y en cómo el arte acompaña, vehicula y ayuda a transitar esos procesos.
Tomé como punto de partida los poemas de Ana Alonso, "Si quieres verme, aquí estoy", en común con la experiencia intrafamiliar de mi madre y su resiliencia a través del bordado.
Así pues, y con la colaboración de mi madre, creamos piezas de dibujo bordado, cojines o almohadas, que a modo de viñetas transitan en lo cotidiano, lo útil, lo reconocible y que mediante un dibujo automático plasma lo intangible, lo no expresado, lo no visto, lo sentido, dando lugar a la aparición de una simbología propia que se revela y potencia el autocuidado. Ampliamos posteriormente con cortinas como elemento de la habitación propia que separa lo privado de lo público.
repetitivoUna segunda vía de exploración es el dibujo repetitivo que conlleva una atención plena del cuerpo y escucha de éste. Los hilos son sustituidos por lápices de color y de nuevo represento emociones, en este caso de forma abstracta.
La instalación final combina ambos y pretendo ampliarla con talleres y nuevas piezas.









